Por Laura S. Lara 

 

El producto de calidad y la cercanía de una materia prima siempre fresca y de confianza son razones de peso para que cocineros de todo tipo y procedencia se aventuren a abrir un restaurante en la misma plaza del mercado. Sus cartas, por supuesto, al servicio de la temporada. 

 

Habitual -Valencia-. Es uno de los últimos en llegar. El estrella Michelin Ricard Camarena ha abierto en el corazón del Mercado de Colón su cuarto restaurante. 'Gastronomía confortable y sin sobresaltos, una propuesta culinaria basada en la cultura mediterránea occidental con ingredientes locales', según su propia definición. Como en sus otras cocinas (una de ellas situada en el modernista Mercado Central de Valencia), en Habitual el producto local como las verduras de agricultores locales, los fiambres caseros, las pastas y la panadería de elaboración propia son los protagonistas. Mercado de Colón · Jorge Juan, 19

 

Abastos 2.0 -
Santiago de Compostela-. El restaurante Abatos 2.0 completa su carta con productos frescos cien por cien gallegos recién sacados de los puestos colindantes del mercado de abastos de Santiago. Lo mejor de Galicia en mini-platos que varían según la disponibilidad del género y que aportan a las recetas tradicionales un componente de innovación para paladares gourmet. Por la noche, cuando el mercado echa el cierre, el ambiente se traslada al Ghalpon (un espacio ampliado de la taberna dado el éxito de esta), donde tienen lugar todo tipo de eventos gastronómicos imprescindibles como los 'jueves de hamburguesa'. Mercado de Abastos · Plaza de Abastos

 

La Ribera -Bilbao-. A la orilla de la ría del Nervión, en pleno casco viejo de Bilbao, este imponente mercado de estilo industrial se erige como referente gastronómico de la ciudad. En su interior se encuentra el restaurante La Ribera, de Beñat Ormaetxea, uno de esos gastrobares en los que el interiorismo se une a la cocina en una fusión perfecta, acompañada aquí cada noche por una alabada banda de jazz. Mercado de La Ribera · Erribera Kalea, 20

 

El Merca’o -Pamplona-. Su nombre suena castizo y tradicional, pero nada más lejos de la realidad. Este sofisticado local de decoración vanguardista alimenta su carta íntegramente con productos adquiridos en el Mercado del Ensanche de Pamplona. Cocina creativa y saludable en la que los productos frescos se llevan la palma y paraíso de los amantes de las ensaladas, pues aquí son de mil colores y todas llevan un toque creativo: cilindros de patata, pulpo troceado, pimentón de la vera...
 Mercado del Ensanche · Tafalla, 5-7 

 

Doña Casta y otros clásicos -Zaragoza-. La ciudad tiene un nuevo place to be y es un mercado gastronómico. Puerta Cinegia es un espacio amplio y moderno con puestos fijos, en su mayoría viejos conocidos de la zona, y mesas altas para compartir. Es el caso de Doña Casta, uno de los sitios más populares de tapeo en Zaragoza gracias a sus deliciosas y originales croquetas, los huevos rotos y las cazuelitas. Otro es Cervino, con buen producto de Aragón en forma de tapas como ‘el cervinito’. El Cantábrico, con pescados y mariscos del norte, salazones de Pinchapán, jamón de Guijuelo de Beher, arroces de Bulebar Gastro, y vinoteca y cervecería con la omnipresente Ámbar, la rubia artesana local. La cocina internacional está presente con Sushi Daily y hay espacio para los sabores mejicanos, italianos, americanos y hasta el dulce de leche argentino de la pastelería Baires. Para comer a la carta, Paladú. Puerta Cinegia Gastronómica · Coso, 35

 

Ninot Cuina -Barcelona-. Este remodelado mercado cuenta con un punto de encuentro en el barrio del Eixample: el Ninot Cuina. En un local cálido y sin pretensiones, desprovisto de decoraciones extremas que recrea la actitud desenfadada, bulliciosa y relajada propia de los mercados de barrio, el chef ha diseñado una carta basada en la cocina catalana con un toque internacional a través de productos de temporada. Tapas, entrantes, clásicos y fusiones, para picar rápido o disfrutar sentado mientras observamos la actividad del espacio integrado en la propia estructura del Mercado: cocina a la vista, arte en las paredes y música en directo. Mercado del Ninot · Casanova, 133