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Jamie Baldridge. The vanity of oneirology, serie “Belle epoque”, 2011.Impresión digital. 110x106 cm y 59x57 cm. Ediciones: 3 y 15. Cortesía del artista y Cámara Oscura galería de arte, Madrid Jamie Baldridge Estudió Teología y Escritura Creativa, pero Jamie Baldridge ha acabado decantándose por la fotografía. No solo la practica sino que la imparte, concretamente en la Universidad de Lousiana (Lafayette). Sus trabajos cuelgan de las paredes de museos y galerías de todo el mundo, como el Ogden Museum of Southern Art, The Rare Books collections of the Library of Congress o The Rhode Island Institute of Technology. En España lo representa la madrileña galería Cámara Oscura. Hace dos años publicó su primer libro, The Everywhere Chronicles. Sus intricadas imágenes tienen siempre un tono surrealista. Cuando eras niño, encontraste un libro titulado 101 Fairy Tales en el ático de tu abuela. Según has comentado, gracias a él te aficionaste a los cuentos, cuyos argumentos y cuya estética han influido de forma determinante en tu estilo fotográfico. ¿Y si nunca hubieras descubierto aquel libro? Qué gran pregunta, y qué dura… Me imagino que, tarde o temprano, habría aflorado mi estilo, porque refleja lo que soy, lo que siempre he sido. Es cierto que ese libro me inculcó, muy temprano, el gusto por la extravagancia y el surrealismo. Pero yo creo que, aunque nunca lo hubiera tenido entre mis manos, habría desarrollado esta vena artística mía, conceptual e inusual. La verdad, no quiero ni pensar en lo contrario. ¿Quiénes son tus cuentistas favoritos? Imagina que pudieras hacerles fotos, ¿cómo serían? Mis cuentistas favoritos, y que conste que los separo de los novelistas, son los hermanos Grimm y quienquiera que escribiera las Upanishads. Si les pudiera hacer una foto a cualquiera de ellos, trataría de transmitir la oscura aunque esperanzadora humanidad que tienen sus historias.
Jamie Baldridge. The visitation, serie “Dystopia”, 2008. Impresión digital. 112x112 cm y 61x61 cm. Ediciones: 7 y 15. Cortesía del artista y Cámara Oscura galería de arte, Madrid Estudiaste Teología. ¿Se refleja eso en tus fotos? Creo que la Teología se manifiesta en mi exploración de la religión y en la búsqueda de la verdad, o por lo menos de un significado. La religión nació de la necesidad del hombre de encontrar sentido a su existencia. En mi opinión, el Arte tiene la misma finalidad. El retoque digital es básico en tu fotografía. Imagínate que hubieras nacido en 1930. ¿Cómo serían tus fotos? De nuevo, buena pregunta. En realidad, mis fotos ya tenían ese estilo particular que las caracteriza antes de que yo empezara a manejar herramientas digitales, que me parecen maravillosas. En aquel pasado no tan distante produje trabajos por medios verdaderamente antiguos y precarios. Montaba en mi estudio unos decorados muy complejos, cuya utilería realizaba yo mismo, y para obtener mis imágenes en el cuarto oscuro tenía que servirme de mil artimañas. Era un trabajo analógico de principio a fin, y era así hasta hace solo unos tres años. Por tanto, si hubiera nacido en 1930, habría tenido que seguir ingeniándomelas para conseguir mis imágenes sin posibilidades digitales. Eres profesor de universidad, ¿qué significa para ti la enseñanza? La de profesor es la mejor profesión con la que podría soñar (desde mi punto de vista, ser artista no es una profesión). Día a día comparto mi pasión con personas llenas de curiosidad y talento; irrepetibles. Además, como docente, estoy permanentemente rodeado de la gente más inteligente y mejor dotada del planeta. Muchos críticos dicen que tu trabajo tiene poco que ver con las corrientes artísticas actuales. ¿Tú qué crees? Que sí, es intencionado, y además es algo a lo que le doy mucha importancia. Salvo contadas excepciones, la mejor manera como podemos describir el arte contemporáneo en general y el fotográfico en particular, es calificarlo de egocéntrico, superficial, impostado, carente de originalidad, confuso y despreciativo con el 99% de la Humanidad. El arte moderno es reflejo del muy poco virtuosismo de los artistas, y de aún menos imaginación. No me canso de decirlo. ¿Cómo creas el ambiente perfecto para fotografiar a tus modelos? ¡Absenta y música! A pesar de tu juventud, gozas de reconocimiento en todo el mundo. ¿Cómo te ves en veinte años? Muchas gracias, ¡yo no creo que sea ni joven ni reconocido! En veinte años me veo trabajando en lo mismo, en un arte provocador, y enseñando a otros a descubrir el artista que llevan dentro. ¿Qué proyectos tienes ahora entre manos? Estoy trabajando en una nueva serie titulada Playing with arsenic que explora un mundo oscuro y politizado, arruinado por las ambiciones psico sexuales de los hombres y sus ansias de poder y control. Volver al sumario de fotógrafos del Calendario El Duende 2012 Texto: Paloma Fidalgo |
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