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Superhéroes cotidianos

Entrevista a Jean- Yves Lemoigne
Devoto de Chris Ware y su Jimmy Corrigan, hace diez años se licenciaba en el colegio de Arte y Diseño de París. Tras varios años como director de arte en la prestigiosa agencia DDB, en 2002 da el salto a la fotografía con una serie en la que aparece su padre bregando en diferentes tareas domésticas.

Las estatuillas de Cannes Lions, EPICA, Clio o New-York Festival no se hicieron esperar. En una de las últimas campañas galardonadas, para un anunciante de medias opacas, atracadores de comercios, con la cegadora malla cubriendo sus cabezas, encañonan sus metralletas a una pila de latas, una impasible planta de despacho o un cubo de la basura.
Sus proyectos son un atisbo del gag visual de Jacques Tati, donde se cultiva una parodia, todavía amable, del hombre moderno. Aquél que, en un acceso de optimismo, se asoma al balcón de su casa y en el vacío cree ver una piscina llena de agua. Entonces diseña la tentativa procaz del salto. Es una experiencia cruel de selección natural, llena de discernimiento y frustración. En octubre de 2002, El Duende dedicaba unas páginas a éstas y otras inconveniencias de la vida de superhéroe.

Photoshop, ¿maquillaje o silicona?
Depende de cada proyecto. A veces se trata más de un maquillaje sin demasiados retoques y otras, sobre todo en publicidad, de cambios más sustanciales. Pero suele ser porque no damos con la localización adecuada o algo así.
¿Aspiran sus fotos a tener tantas capas como lecturas? Dicho así suena gracioso, pero sí. Me gusta que la gente pueda descubrir un detalle nuevo cuando ve la foto por octava vez.
¿Cuánto cuesta una idea? Algo de sudor, una hoja de papel y un lápiz. Nada cara, ¿no?
¿Hasta qué punto uno se debe a su estilo? Creo que lo más importante es la sinceridad. Si haces cosas en las que crees, el estilo aparece por sí solo.
Desde pequeño quise ser dibujante de cómics. De ahí que el tema de mi primer trabajo tuviera algo que ver con ese universo. Le doy mucha importancia a la historia. Cuando me planteo un proyecto, escribo un pequeño guión, como si fuera un cortometraje.
Para entender la profesión ¿hay que pasar por el analógico? Sin duda. El formato analógico te obliga a pensar antes de lanzar la foto, más si eres estudiante y no tienes dinero para revelados. En digital, la gente dispara y luego piensa.
¿Es la imagen un idioma universal? Lo es si compartimos los mismos referentes. La cultura global nos hace pensar que sí, pero yo no soy de esa opinión. La imagen es el lenguaje universal de Occidente.
Hablando de Occidente, una foto representativa de la última década sería… Las Torres Gemelas de Nueva York.
Los superhéroes de hoy en día, ¿hacen de su capa un sayo? (Ríe) Algunos resultan demasiado peligrosos para la seguridad del mundo. Es triste, pero en Francia existe el principio de precaución: si algo supone un riesgo, mejor no lo hagas.

¿Qué superpoderes ha de tener un héroe cotidiano para sobrevivir a su rutina?
Rayos-X, brazos elásticos o simplemente voluntad para hacer algo.
¿Se considera un fotógrafo de lo cotidiano? Me gusta utilizar la rutina como punto de partida. Que todo el mundo pueda reconocerse en mis trabajos. Creo que eso es lo que hace creíbles mis fotografías.
El de las fotos es su padre. ¿Qué hay detrás del posado? Podríamos decir que se siente orgulloso de participar en algo que cambió la vida de su hijo. Porque, a raíz de esta serie, se produjo el cambio.
¿Es la fotografía la última parada de su carrera profesional? Realmente no lo sé. No me considero un fotógrafo, así que no creo.
¿Quién es su superfotógrafo favorito? Guy Bourdin, un paisano.
¿Por quién no le gustaría ser salvado? Por George Bush.
¿Qué superpoder le gustaría tener? Congelar el tiempo. Todo pasa demasiado rápido…

Texto: Benjamín García-Rosado.
Fotos: Jean-Yves Lemoigne. 
www.jeanyveslemoigne.com

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Superhumanos
El Duende 29 - octubre 2002

En pleno renacer del género de superhéroes, merced a las abundantes adaptaciones cinematográficas de la década fomentadas entre otras cosas por las mejoras en los efectos especiales, nos acercamos a sus superproblemas. Por la consulta del psiquiatra hicimos pasar a Superman, Batman, Spiderman, Lobezno, Hulk, Elektra y Superlópez para que nos confesasen sus problemas más íntimos, más "humanos".
Imagen de portada (detalle): Aurelio Lorenzo

 

Superhéroes cotidianos. Jean- Yves Lemoigne