Degustando historias: Homenaje a la prensa gastronómica
Una nueva edición de HAVANA 7. HISTORIAS QUE CUENTAN volvió a abarrotar el Teatro Calderón de Madrid la pasada noche del 11 de marzo. Fue en la séptima entrega de este proyecto del ron Havana Club 7 Años que homenajea al Periodismo en sus distintas ramas, en esta ocasión, la gastronómica.
Cuatro grandes nombres de esta rama profesional se subieron al escenario representando dos generaciones distintas: por un lado, dos Premios Nacionales de Gastronomía por su labor periodística: Paz Ivison y Cristino Álvarez, recientemente galardonado, además, con el Premio Álvaro Cunqueiro 2014. Por otro, el popular El Comidista, Mikel López Iturriaga y la Presidenta de la Asociación de Prensa Gastronómica, Yanet Acosta. Presentando y moderando el evento estuvo el chef de Dassa Bassa Darío Barrio.
La diferencia fundamental que encontraron los ponentes entre sus respectivas épocas de trabajo fue la incorporación de los blogs y las redes sociales a sus vías de comunicación con el público, incluida la actual tendencia a hacerle fotos a la comida con el móvil: “A mí me suelen criticar porque mis fotos son realistas y no esos platos de fantasías fotográficas que se suelen publicar en otras webs o en redes como Pinterest, “maqueadas” y pasadas por el Photoshop como las modelos. Me irritan”, afirmó Mikel L. Iturriaga, sobre cuyo blog, El Comidista, Cristino Álvarez observó que le costó tomarse los blogs en serio “hasta que conocí el de Mikel”.
Abundando en la manera de elaborar informaciones gastronómicas, Yanet Acosta, empezó por aclarar que “no es lo mismo el periodista que el crítico gastronómico. La gastronomía sirve para conocer una cultura por medio de su comida, algo en lo que yo, que viajo mucho, me he especializado. La gastronomía es incluso política, ¿por qué, si no, se inventó el plato único en España?”. Álvarez apostilló que “comidas de otros países que nos parecen raras, seguro que están buenas; si no, no las comerían. Por cierto, ¿os habéis fijado que todo lo exótico decimos que nos sabe a pollo?”, y afirmó que lo más raro que él ha probado ha sido el “ojo de mono”.
También se abordó la influencia real de una crítica gastronómica, “no tenemos tanto poder, como la prensa deportiva, aunque no fue capaz de hacer caer a Mou”. También se trataron los extraños criterios con los que a veces se dan los premios, “al final todo se reduce a la influencia de las entidades con más dinero y sus cocinas favoritas o centros donde tienen acciones económicas”, o el creciente furor de los programas de cocina, “son formatos importados de Estados Unidos. Aquí, antes de Pesadilla en la Cocina, la gastronomía era casi tabú en prime-time, el programa de Arguiñano lo emitían a la hora de comer” observó Iturriaga; y el eterno debate sobre si un periodista gastronómico puede ser amigo de un cocinero, “yo apenas tengo amigos cocineros”, sentenció el propio Comidista.
La charla también se amenizó con las intervenciones de chefs como Sergi Arola o Juan Pablo Felipe. Y como siempre, en directo la banda de jazz Havana 7 Band al ritmo de cinco nuevas creaciones de coctelería con ron Havana Club 7 Años. Cinco perfect serves inspirados en la personalidad y gustos de los ponentes.
En un evento sobre gastronomía debía ser muy especial el catering, como así fue, con una selección de seis productos gourmet para degustar: el jamón de bellota ibérico puro Gran Reserva de Arturo Sánchez bajo el sello Elite Gourmet; el delicioso queso Capricho de Cabra Crottin de la Quesería Bon Fromage; las inmejorables patatas fritas extra virgen San Nicasio, elaboradas con oro líquido y salpicadas con la sal rosa del Himalaya; el fragante, distinguido, premiado y repleto de aromas aceite de oliva extra virgen de Casas de Hualdo en su variedad Arbequina; el especialísmo y singular pan hojaldrado artesanal del Primer Premio de Panadería Artesana Lazareno Gourmet y la nota dulce, crujiente y adictiva elaborada con chocolate Grand Cru por el Horno San Onofre.
Texto: EDM. Fotos: Goyo Conde
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