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Life On Mars?
Marte. La conquista 
de un sueño 
 
Por Inma Flor  · Imagen: evidencias de agua en Marte, NASA
 
Si te asomas por el ojo de buey de nuestra nave podrás contemplar la inhóspita superficie de Marte, a la que llegamos tras embarcarnos a través de las salas de exposiciones de Espacio Fundación Telefónica. Quimera o realidad, lo cierto que es que Marte lleva instalado en nuestro imaginario colectivo desde hace ya 4.500 años, cuando los asirios fueron los primeros en referenciar el planeta rojo.
 
Su color rojizo (que se debe a los elementos que componen su superficie, ricos en hierro) y su extraño movimiento (distinto al del resto de planetas debido a la retrogradación) son, en parte, responsables de una fascinación que ha llegado más allá del especializado ámbito científico. Autores de todas las disciplinas, desde HG Wells, cuya recreación radiofónica causó el pánico en Estados Unidos en 1938, a Ray Bradbury; de Yákov Protazánov a Tim Burton; o de David Bowie o John Coltrane, se han inspirado en sus misterios a través de un sinfín de libros, películas, música, cómics, ¡hasta sellos! 
 
Todo tipo de productos 'marcianos' que son parte de nuestro acervo cultural y un reflejo evidente de la seducción del ser humano por este planeta cuyo nombre es un homenaje al dios de la guerra de la mitología romana. La existencia de vida marciana, sin embargo, no deja de ser una ficción y un deseo, donde Marte no es sino 'una especie de espacio mítico donde proyectamos nuestras ilusiones y miedos', argumenta María Brancós, Responsable de exposiciones de la Fundación Telefónica. Y, añade, 'aunque nombres tan reconocidos como Tesla, Marconi o Schiaparelli avivaron más que nadie lo que de ficción tiene la ciencia de Marte, hablando no solo de la existencia de canales de agua, sino incluso de vida marciana', no hay nada que corrobore dichas teorías. 
 
Marte promete seguir dando 'guerra'. La NASA prevé el lanzamiento de la primera misión tripulada a Marte para la década de 2030: los astronautas aspirantes ensayan en lugares de la Tierra como la Isla de Devon, en el Ártico, o en Riotinto, en Huelva. Y eso que hasta hoy se han realizado 43 expediciones relacionadas con Marte y menos de la mitad han sido plenamente exitosas. Pero si hay algo que identifica al ser humano es la voluntad y capacidad de superación, y nuestra cabezonería, para qué negarlo. 

 
Las mejores condiciones para viajar a Marte, nos cuenta el astrofísico y asesor científico de la exposición, Juan Ángel Vaquerizo, 'se dan cada dos años, en función de la posición del planeta respecto al Sol y la Tierra. Científicos e ingenieros buscan la ubicación idónea para establecer el primer puesto, teniendo en cuenta las dificultades del aterrizaje y el reto de sobrevivir allí, tanto desde un punto de vista alimenticio como, entre otros problemas, por la necesidad de protegerse contra la radiación'.
 
De hecho, existen ya proyectos que abordan asentamientos en Marte: desde la construcción bajo tierra, iglús o la terraformación, es decir, la transformación progresiva del entorno marciano en otro más parecido al de la Tierra. No en vano, añade Vaquerizo, 'hace muchísimo tiempo Marte se parecía bastante a la Tierra y pudo haber agua líquida en superficie, lo que parece indicar que pudo haber vida. No se trata de buscar vida celular como la que tenemos aquí, sino condiciones de habitabilidad', aspecto a tener en cuenta de cara a un futuro que no se prevé muy halagüeño para nosotros, los terrícolas. Sin embargo, Marte es actualmente muy distinto a la Tierra.
 
Curiosidades marcianas. Marte es mucho más pequeña que la Tierra y tiene dos lunas (Fobos y Deimos). Su gravedad es menor, por lo que un hipotético ser humano que quisiera vivir allí evolucionará fisiológicamente de una manera muy distinta a nosotros; su atmósfera es muy diferente, lo que hace que las condiciones en la superficie de temperatura y de presión sean distintas, y no tiene agua en superficie. Si mandas un mensaje a Marte tarda de 3 a 22 minutos solo ida, dependiendo de la distancia a la que se encuentra de la Tierra. El día marciano dura 40 minutos más que el terrestre. El año marciano dura 687 días terrestres.  
 
'Marte. La conquista de un sueño' ·Espacio Fundación Telefónica · Hasta el 4 de marzo 

Life on mars?